Muchas personas actualmente sufren por cargar con discursos sociales que no tienen que ver con sus necesidades ni deseos.
Por ejemplo hoy vamos a analizar uno de estos discursos y el impacto que tiene en las personas: "El de la desintegración familiar"
Se piensa que las personas que se divorcian, hacen que las familias se desintegren. Es decir, el que los padres ya no estén juntos va a llevar automáticamente a que los hijos sean infelices, a que sufran porque "ya no están juntos los padres", a que sean mal vistos socialmente.
Pero hay que tener cuidado con estos juicios, porque pensemos que el que los padres se divorcien no quiere decir, que se les quite a los hijos a uno de los padres, más bien ahora tendrán que aprender a conformar dos familia: el papá y los hijos serán una familia, la mamá y los hijos serán otra familia. No es que desaparezca la familia como tal, se construiran ahora dos familia y pueden ser felices en esa otra forma de relación.
El problema reside en que muchas veces los padres, se siente muy culpables porque sienten, que le están haciendo daño a los hijos, pero esto no opera así. El que la relación entre los padres no haya funcionado, no quiere decir que no quieran a los hijos, que los hijos no se puedan sentir bien y estar a gusto con sus padres en diferentes momentos.
Cuantas veces hemos escuchado: " No me divorcio de tu padre, por ustedes mis hijos", y entonces cargan a los hijos con esto y los usan de pretexto para no concluir o no mejorar su relación con el otro.
No se trata de estar a favor o en contra del divorcio, si no de analizar como gran parte del sufrimiento de las personas divorciadas, reside en estos discursos, en donde no se dan la posibilidad de construir un discurso, acorde al deseo de las personas.
Si estas por divorciarte, o recien divorciado pregúntate:
¿Cómo me gustaría que fuera de ahora en adelante la relación con mis hijos?
¿Cómo tendría que darse la convivencia con ellos?
¿Cómo se dará la relación con la madre o padre de mis hijos?, (será cordial y sólo para coordinar actividades de los hijos)
¿Qué reglas tendremos que poner en casa para convivir mejor?, etc.
Es decir, te invito a construir tus relaciones, para ser feliz y no desde el lugar común, desde los prejuicios que sólo nos enferman y nos hacen ser infelices.
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